Hemos diseñado un pack con todo lo que necesita. Juguetes con diferentes texturas, durezas y materiales así como comida, snacks y premios.
Antes de traer un gato a casa tienes que saber ciertos detalles importantes que a todo papá gatuno le hubiera sabido conocer antes de aventurarse. No es nada negativo, al contrario, son detalles que te ayudarán con la convivencia y el crecimiento de tu peludo. ¡Vamos a repasarlos!
Mucho cuidado con la alimentación de tu gatito
Hay familias (yo me incluyo) que cuando encuentran un gatito por la calle o alguien que los da en adopción, no tienen en cuenta la edad del bebé. En mi caso, encontré 2 bebés en la calle que ni siquiera tenían los ojos abiertos, ¿pero qué iba a hacer? ¿Dejarlos ahí? Claramente no.
No me importó tener que darle el biberón, pero me surgieron muchísimas dudas y (problemillas) que me hicieron pasar mucho miedo durante la etapa de lactancia de los peludos.
Los gatos NO pueden beber leche animal, por favor, esto es muy importante. Un gato bebé no puede tomar leche de vaca o de cabra, ni ninguna otra que no sea especial para ellos. En cualquier tienda de animales incluso hipermercados encontrarás preparado de leche para felinos. Si te estás preguntando si los gatos pueden tomar leche, la respuesta es NO.
La diferencia es sencilla, la leche de otro animal puede provocarle vómitos, hinchazón, diarreas, indigestión e incluso provocarle la muerte. No toleran bien la lactosa ni la digieren bien y siendo tan pequeños, un problema gástrico puede acabar con su vida.
El preparado de leche para cachorros no lleva lactosa, suele llevar calostro y es una fórmula preparada a conciencia con todos los ingredientes esenciales y los nutrientes necesarios.
Emoción, alegría y mucho amor. Eso es de lo que tiene que sobrar en tu hogar el primer día (y el resto de su vida) que llega el gatito a casa. Pero también tienes que tener sus cosas preparadas, sigue leyendo que acabamos pronto. 😻
En primer lugar, ¿cuál es la edad ideal para adoptar un gato? Bien, aquí, dependiendo de la situación puede existir una respuesta u otra. Lo ideal es a partir de los 2 meses de edad, cuando el gatito ya está destetado y está empezando a comer solo. En esta etapa de 2 meses de vida aprenden y adquieren herramientas esenciales que necesitan como gatos, aparte de estar alimentándose de la leche de su madre, que es sin duda el único «alimento» completo que es capaz de recibir.
Cuando llegue a casa tendrás que tener lo siguiente 👇🏻
Es sencillo, para mí sin duda lo más importante es el arenero y los juguetes, olvidándonos de la alimentación de calidad que eso ya en esta familia lo tenemos más que asumido 😼 Te sorprenderá lo rápido que es capaz un gato de usar el arenero por su cuenta, sin enseñarle nada, ¿eh? Es puro instinto, les encanta rascar y escarbar entre la arena, por eso te recomiendo que le tengas a disposición 2 areneros, alejados siempre de la comida y el agua y si es posible, también de la zona de descanso.
Por ejemplo, si tienes el comedero /bebedero, rascador y cama en el salón, el arenero debería de ir en el baño, y el segundo arenero en la terraza, habitación libre e incluso cocina.
El periodo de adaptación variará dependiendo de la edad del gatito. Si es un cachorro (2-3 meses) la adaptación suele ser más rápida, en cuestión de 3 o 4 días estará como en casa. Si tiene entre 4 y 8 meses puede que tarde 1 semana en sentirse medianamente cómodo en casa.
¡IMPORTANTE! 🚨 Si tienes terraza/balcón en casa es muy importante que cuentes con una red, para evitar que tu gato se caiga accidentalmente o por desgracia, tenga el sindrome del paracaidista gatos, que se trata de un motivo de visita muy frecuente en el veterinario, es cuando el gato se lanza desde una altura sin controlar dónde caerá y sin ser consciente de que está tan alto como para poder sufrir daño. Ocurre con gatos de TODAS las edades y con diferentes motivos, instintos de caza, ver un pájaro o mariposa o simplemente por curiosidad.
Hemos diseñado un pack con todo lo que necesita. Juguetes con diferentes texturas, durezas y materiales así como comida, snacks y premios.
Aunque no te lo creas, educar a un gato pequeño es muy fácil. Aunque los gatos sean animales independientes y que van a su rollo, son muy muy inteligentes. Desde bien pequeños les puedes enseñar a no subir a ciertos sitios, no entrar a cualquier habitación, a reconocer su nombre, a hacer croquetas e incluso hacerse el muerto. Empieza por trucos fáciles, como el de tumbarse o sentarse dándole recompensas apetitosas cada vez que trabajes con él.
Un gato necesita una serie de vacunas para estar protegido ante posibles enfermedades.
Los gatos deben de encontrar su propio lugar de descanso. Un gato no es como un perro, que tiene una camita y siempre acude a ella para estar a gusto. Los gatos suelen ser más activos, duermen sobre una mesa, en la cama, en un sofá, en el suelo, y en casi todas las ocasiones, como última opción eligen su cama para dormir. Permítele a tu gato encontrar por sí solo un lugar donde dormir tranquilo.
Si has adoptado un gatito bebé los primeros días no parará de llorar, sobre todo por la noche. Hasta la cuarta semana de vida no empezarán a necesitar menos tomas de leche, es decir, un gato recién nacido necesita de 6 a 8 tomas diarias de leche. Por la noche tendrás que despertarte para darle de comer. Al estar lejos de su madre y en un entorno «diferente» es normal que maúllen y se quejen. Pero paciencia, cuando tienen 1 mes todo empieza a cambiar. Intenta que esté en una temperatura óptima, que tome todas sus tomas de leche y que un veterinario valore su estado de salud.
Los gatos pequeños y adultos suelen ser muy activos por la noche. Maúllan, corren, juegan y se aburren, sobre todo esta última. Es muy normal que tu gato elija la noche para maullar a una puerta, al arenero, a la ventana o que incluso te salte por encima de la cama. La solución infalible para este problema es conseguir que durante el día estén activos, jugar con ellos, mimarles y que se cansen. Los gatos sedentarios se aburren mucho.
Si el gato no puede quedarse con su mamá lo primero que debes de hacer es acudir al veterinario para valorar su estado de salud. Una vez realizado este paso, intenta crear un entorno cálido y cómodo, una caja con mantitas, un transportín o una camita. La zona en la que esté acurrucado el gato tendrá que estar entre 20ºC y 22ºC, ni más ni menos. Los bebés no son capaces de regular su temperatura y pueden resfriarse.
Nunca le des leche animal, necesitas leche maternizada artificial, con un biberón y una tetilla pequeña para que pueda mamar sin dificultad y sin atragantarse.
La temperatura de la leche debe de estar entre 37 y 38 grados. Repartida entre 4 y 8 tomas diaria de 10 – 20 ml de leche y con márgenes de entre 3 y 6 horas para digerir y asimilar el alimento.
La posición del gatito es importante, cabeza erguida y la barriga sobre las toallas, no lo cojas como un bebé humano, si la leche se le va por mal lado puede coger neumonía por lactancia.
Tener un gato en el piso es lo mejor que te puede pasar. Mientras le tengas un entorno seguro, con sus necesidades básicas cubiertas, un gato en un piso puede ser feliz,